Coje coche, mete bici, pide permiso, organiza
con tiempo. Si quieres ver algo distinto te tienes que meter en estos
verenjenales.
Al día siguiente te das cuenta que merece la pena.
Acabamos de descubrirla y ya estoy deseando volver.
Comparable con las trialeras de Sierra Espuña sin nada que
despreciar y aún más cerca.
Otro gran descrubrimiento.